Las empresas alemanas del sector de autopartes han incrementado significativamente su inversión en México durante el primer semestre de 2024, alcanzando cifras récord gracias a la creciente demanda de importantes fabricantes de automóviles en el país. Según Francisco González, presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes (INA), la inversión extranjera en este sector llegó a 1,634 millones de dólares, de los cuales Alemania representa un impresionante 47.3%. Este aumento ha consolidado a Alemania como el principal inversor, superando a Japón y Corea del Sur, que aportan el 20.2% y el 11%, respectivamente.
La Inversión Extranjera Directa (IED) de empresas alemanas se situó en 4,167 millones de dólares, marcando un hito en la relación económica entre México y Alemania. Las regiones más beneficiadas por esta inversión son Puebla, San Luis Potosí y Jalisco, siendo San Luis Potosí el estado con mayor crecimiento en la producción de autopartes, con un aumento del 10.37% en la industria entre enero y julio de 2024. Empresas como BMW y General Motors han incrementado su producción, lo que ha llevado a un aumento en la demanda de autopartes y ha motivado a las empresas alemanas a buscar nuevos proveedores locales para fortalecer la cadena de suministro.
Un fenómeno notable en este contexto es la regionalización de la manufactura, donde muchas multinacionales que antes producían en China están trasladando sus operaciones a México. Esta tendencia responde a la estrategia “China Plus 1”, que busca diversificar las cadenas de suministro y acercar la producción a mercados clave como el estadounidense. En este sentido, alrededor de 65 nuevas empresas han comenzado a invertir en el país, evidenciando un cambio en la dinámica de la producción global.
El nuevo gobierno de México, ha mostrado un compromiso por impulsar la industria automotriz, creando un ambiente favorable para las inversiones extranjeras. Esta colaboración entre el gobierno y el sector privado no solo fortalece la confianza de las empresas alemanas en el mercado mexicano, sino que también posiciona a México como un destino estratégico para la industria automotriz a nivel global, impulsando el crecimiento continuo y la llegada de nuevas inversiones.